Las plantas que no pueden faltar en tu rocalla

Una rocalla es una superficie ajardinada que combina rocas con distintos tipos de plantas para conseguir un aire rústico y alpino. Este diseño de jardín es perfecto para terrenos pobres, rocosos y con desniveles, ya que las especies vegetales que se utilizan se adaptan muy bien a este tipo de suelos, convirtiéndolos en un espectacular elemento decorativo.

Características generales de las plantas de rocalla

Por lo general, las plantas de rocalla se caracterizan por su carácter rústico (resisten bien condiciones adversas, suelos pobres y no requieren demasiados cuidados para sobrevivir), aunque podemos utilizar especies que no lo sean tanto en función de las características concretas de nuestro terreno.

Las plantas anuales son muy usadas en las rocallas, ya que nos permiten cambiar la estética del jardín cada año, aunque también podemos plantar especies perennes si queremos despreocuparnos de la tarea de renovarlas año a año.

Las plantas de rocalla más populares

La clave para conseguir una rocalla original y atractiva es combinar plantas de diferentes estilos y colores. Estas son algunas de las más utilizadas:

Arbustos con flor

Los más adecuados para una rocalla son los de hoja perenne, aunque también podemos usar los de hoja caduca. La lavanda, la azalea, el rododendro, el brezo, la grevillera… son arbustos ideales para rocalla.

Coníferas enanas

Si quieres añadir algún árbol pequeño, coníferas como el ciprés, la tuya, el pino o el junípero (todos en su variedad enana) funcionan muy bien, ya que permiten jugar con distintas alturas y volúmenes.

Plantas bulbosas

Tulipanes, jacintos, narcisos, fresias, iris, azucenas… las plantas que nacen de bulbos proporcionan bonitas flores y colores a las rocallas. Además las hay de otoño y de primavera (según la temporada en la que se plantan), por lo que es fácil mantener el jardín florido todo el año según las especies que utilicemos.

Plantas tapizantes

Así se conocen las plantas de porte más bien rastrero que crecen extendiéndose horizontalmente por la superficie del suelo, formando una cubierta. En esta categoría encontramos de todo: distintos tipos de rosales cubresuelos, iberis, campanillas, verbena, alyssum… Muchas de ellas florecen, por lo que aportarán un bonito toque de color al terreno.

Suculentas

En terrenos especialmente secos y áridos, las suculentas serán tus mejores aliadas, ya que son especialmente resistentes a estas condiciones. Existen innumerables especies de suculentas, pero en este caso lo mejor es que elijamos aquellas que crezcan formando colonias o de forma rastrera. Siemprevivas, ágaves, aloes, aeoniums, sédums, cactus… suelen ser excelentes opciones.

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