Jardín de invierno: tareas para mantenerlo en perfecto estado

Hace unos días que hemos inaugurado un nuevo año y con él uno de los meses más fríos del año, enero. En esta época la actividad de las plantas suele caer bajo mínimos, pero no por ello dejan de requerir cuidados específicos, esenciales para que en primavera puedan volver a brillar en todo su esplendor. Si quieres saber cómo debes cuidar tu jardín durante este mes, no te pierdas este post.

Cuidados dentro de casa: protege tus plantas de interior

Aunque las plantas de interior no están tan expuestas a la meteorología invernal como las del jardín, también requieren de nuestra atención durante estos días. Para empezar, en enero tenemos muchas menos horas de sol que en otras épocas del año, que se ven todavía más reducidas de puertas para dentro. Si no quieres que tus plantas sufran por falta de luz intenta colocarlas lo más cerca posible de las ventanas, sobre todo de aquellas con una mejor orientación hacia el sol. Eso sí, asegúrate que esas zonas están bien aisladas y no están expuestas a problemas de condensación o corrientes de aire, ya que podrían perjudicar a tus ejemplares.

También es importante controlar la frecuencia del riego, ya que la gran mayoría de plantas están más inactivas este mes y requerirán mucha menos agua. Por último vigila la cercanía de las plantas a radiadores u otras fuentes de calor, ya que les pueden afectar negativamente.

Protege tu jardín del invierno

Las plantas de exterior recibirán de lleno las duras inclemencias climáticas, así que deberemos preocuparnos de que se mantengan en óptimas condiciones para que sobrevivan al invierno. Las especies más sensibles y que tengamos en tiestos pueden ser trasladadas al interior de nuestra casa. Las que no puedan ser cambiadas de ubicación tendremos que protegerlas de heladas y vientos, sobre todo si no son especialmente resistentes. Usar mantas térmicas o proteger las raíces con corteza u otros elementos similares nos ayudará en esta tarea. También es necesario vigilar en qué momento del día se hacen los riegos (si es que estos se requieren) para evitar que las plantas lleguen mojadas a la noche y se hielen.

Otras tareas típicas del mes son la poda, principalmente de los rosales y otros arbustos, y la sustracción de malas hierbas y eliminación de plagas. También podemos evitar que el sustrato se compacte aireando y mullendo el suelo. Por último y no por ello menos importante, podemos aprovechar este momento de menor actividad en el jardín para planificar y pensar modificaciones del jardín de cara a la primavera.

Protección y mantenimiento: esas son las palabras que resumen los cuidados del jardín en invierno. Si quieres que tus plantas se mantengan sanas y sigan deslumbrando en los próximos meses no te olvides de realizar estas tareas ahora. Todo lo que necesitas para llevarlas a cabo lo puedes encontrar en Viveros O Piñeiro.

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